viernes, 31 de diciembre de 2010

2010: Un Balance Literario

Un año que termina, un blog que empieza.

Y lo hace sin más aspiración que la de servir de archivo histórico para mis lecturas; ésas que son tantas y tan variadas que, lo tengo que confesar, a veces olvido argumentos, aunque nunca impresiones generales. (Y en eso, a su vez, mucho tiene que ver mi libretita, en la que cada libro lleva una crucecita más marcada o más difuminada según el grado de placer que haya proporcionado la obra en cuestión).

Supongo que al final he decidido, por mi propio interés, no pecar de 'cabezona' (como suele ser costumbre) y hacer caso a mi hermana (y alguna otra voz aislada) que me decían: "¡¡Hazte un blog!!". Así que... ¡aquí estamos! Aprovechemos bien, pues, las nuevas tecnologías, de forma que cada libro tenga al menos su imagen, si bien nadie promete comentarios interesantes. Dicho queda.

¿Cómo va a funcionar esto exactamente? Supongo que lo iremos descubriendo sobre la marcha... Pero, ahora, a lo que toca, puesto que es 31 de diciembre y se nos va el 2010: balance literario.
[El personal, mejor no hacerlo, pues creo que está bien claro que, prometiendo mucho, el 2010 fue un año en que muchas cosas se perdieron... aunque siempre pudo haber sido peor].

Economista de-formación, pringada de profesión y lectora empedernida por vocación, que a nadie le sorprenda que empecemos la andadura con algún número que otro: después de todo, siento una reconocida simpatía por las estadísticas; y, hablando de balances, lógico es que aparezca alguna cifra... ¿o no?

Así pues: 2010. Un año en el que 112 libros pasaron por mis manos para quedarse el tiempo necesario para su correspondiente lectura.
Un 47% más que en el año anterior (2009, con 76) o un 77% más que hace dos (2008, 63); apenas 1 más que en el 2005, aunque sin llegar a las cifras de 2003, 2005 o el histórico 2004 (¡¡156!!).
Lo cual, al fin y a la postre, no viene sino a poner de relieve los avatares de mi propia vida: ¡el desempleo es lo que tiene!

Lo dicho: 112... algo así como 1 libro cada 3 días y cuarto. Aunque, en realidad, las cosas no fueron así exactamente, pues el principio de año fue época de escasez, mientras que el final ha sido puro diluvio.

Pero... ¡basta de cifras! Mejor hacemos un recorrido por lo más destacado del año. ¿Cómo? Echemos mano otra vez a la mentada libretita; ésa en la que, además de con crucecitas, todos los meses un libro es destacado entre el resto: en efecto, algo así como el 'libro del mes' (¡Jaja! Sí: poco original...). Aunque, claro: a veces un mes nos da más de una sorpresa, mientras que otros pasan sin pena ni gloria. ¡Da igual! Al grano...

ENERO (Cuando las cosas empezaron a cambiar)- 2

*Libro del mes: "Ecos del pasado", de Charlotte Link. Alta dosis de tensión e intriga en esta novela alemana.

FEBRERO (¡Estudia, estudia, estudia...!)- ¡1!

*Libro del mes: "La Espada de San Jorge", de David Camus.
Teniendo en cuenta que el libro venía con la dedicatoria del autor, que esperaba que disfrutase acompañando a Morgennes en sus aventuras, supongo que me hubiese gustado estar a la altura de las circunstancias. Sin embargo, he de reconocer que la lectura se me hizo un tanto tediosa, por más que el inicio me pareció prometedor.

Lo que para mí no es sino demostración de una de mis teorías: que el estado de ánimo y el ambiente influyen a la hora de leer... y tanto estudio, además de ralentizar la lectura, supongo que hizo que, en resumidas cuentas, no estuviese ni del todo centrada ni muy motivada...


MARZO (Nuevo trabajo... agotando las reservas caseras)- 5

*Libro del mes: "Shutter Island", de Dennis Lehane. Probablemente, lo más desconcertante y confuso que he leído del autor hasta la fecha, aunque, por supuesto, eso es lo que se pretende en esta historia ambientada en un inquietante sanatorio mental ubicado en la isla que da nombre al libro.

Pendiente tengo aún la película, también estrenada este año. Si a Martin Scorsese le sedujo esta historia será porque, en efecto, algo tiene.


ABRIL (¡Qué estrés!... Aún duran las reservas.)- 4

*Libro del mes: "En Llamas", de Suzanne Collins.

Sobran las palabras... ¡Qué bueno! Con gran dolor de mi corazón tengo que decir que éste no es mío, sino de mi hermana. Pendiente tengo el cierre de la genial trilogía de "Los Juegos del Hambre" ("Sinsajo") que, sin duda, no tardará en caer.


MAYO (Caída en picado... ¡Plaf! Y llegó la baja...)- 3

Tres buenos libros, tres buenas inversiones (adquiridas, por cierto, en mi librería de referencia "Noveno Arte"... ¿será porque me hacen descuento familiar?).

*"La Soledad de Charles Dickens", de Dan Simmons, vuelve a demostrar la gran maestría de este autor en todos los géneros (ciencia ficción, terror, novela negra...), en este caso en una novela de toque histórico con ciertos aires oníricos (el opio es lo que tiene).
No obstante, creo que para quien no sea lector asiduo de Simmons, y con una temática similar, recomendaría "El Último Dickens", de Matthew Pearl, de lectura más fácil y puede que hasta más amena.

Disputándose el título de "libro del mes" estarían las otras dos lecturas de Mayo:

*"El Héroe de las Eras", de Brandon Sanderson. La tercera y última parte de la soberbia trilogía fantástica "Nacidos de la Bruma", que no viene sino a confirmar que este mormón es, en efecto, uno de los nuevos maestros del genero. Y, aún así, creo que su primera novela, "Elantris", sigue siendo mi favorita hasta la fecha; pero ello no es óbice (¡jajajaja! mi palabra comodín en los comentarios de texto pre-selectividad) para que espere con gran ilusión la publicación de su nueva obra para el mes de enero... Sin duda, volveremos a hablar de Sanderson a no mucho tardar.

*"Generación Dead", de Daniel Waters constituye, para mí, uno de los mayores descubrimientos de este año que termina. Una novela que podríamos definir de 'JR' (traducido para prófanos: 'Júvenil Romántica'. Un género que para muchos nace con el 'boom' de "Crepúsculo" o "Memorias de Idhún" a nivel nacional, pero que, en realidad, ya llevaba años, sino siglos entre nosotros), pero que destaca entre el resto por su originalidad y el sarcasmo latente del autor.

La historia de la chica enamorada del zombie (o chico con diferente factor biótico) es, en realidad, mucho más de lo que parece a simple vista. Personajes atractivos en su concepción que demuestran que las cosas no siempre son lo que parecen; y una forma sutil de plantear temas tan tradicionales (o actuales) como el problema de los prejuicios, la hipocresía o la exclusión social...

Altamente recomendable, estoy segura de que volveremos a hablar de esta serie en breve.



JUNIO (Reflexiones, decisiones... ¡bye, bye!)- 11

*Libro del mes: "Temblor", de Maggie Stiefvater.

Preciosa historia que, para mí, resiste sin problemas las comparaciones con otros nuevos clásicos de la literatura moderna en el ambito juvenil (más 'JR') como ya la mencionada saga de Meyer. Una termina la lectura perfectamente dispuesta a cambiar los vampiros de Forks por los hombres lobo de Mercy Falls y deseando que la segunda parte no se demore en demasía... lo que me recuerda que ha sido publicada recientemente, así que habrá que estar al acecho.


Junio también fue el momento de comprobar que algunos betsellers están, para mí, sobrevalorados ("Los Hombres que no Amaban a las Mujeres", de Stieg Larsson); que el afán de algunos por explotar la gallina de los huevos de oro puede llegar a ser tremendamente decepcionante ("La Segunda Vida de Bree Tarner", de Stephenie Meyer); que los mejores libros de un escritor no son necesariamente los que alcanzan la mayor fama (hermosa historia de amor con el trasfondo de la rusa zarista la de "La Casa del Propósito Especial", de John Boyne); que a veces resultan interesantes cuando grandes novelistas revisitan los clásicos ("La Nueva Vida de Miss Bennet, de Colleen McCullough); o que, por más alargada que sea la sombra del gran George R.R. Martin, hay savia nueva en la literatura fantástica épica ("Acacia", de David Anthony Durham).

JULIO (Reapertura de la 'Bances Candamo' y un nuevo filón: ¡la sección juvenil!)- 12

*Libro del mes: "Fuego", de Kristin Cashore.
Autora que captó mi interés con "Graceling", ambientada en el mismo mundo aunque unos cuantos años después, pero que en esta ocasión me cautivó por completo. La protagonista (Fuego), la última de los monstruos con forma humana, vive desconfiando de todos aquellos que la rodean y sus sentimientos hacia ella, incapaz de distinguir si el origen de estos es auténtico o nace de sus propios poderes de monstruo, así como de sus intenciones, pues teme verse convertida en un arma política. Interesantes reflexiones sobre la moral, en una aventura apasionante y llena de sentimiento.


AGOSTO (Vida involuntariamente contemplativa de una desempleada)- 12

*Libro del mes. En realidad, una trilogía al completo: la formada por "Las Flechas de la Reina", "El Vuelo de la Flecha" y " La Caída de la Flecha", de Mercedes Lackey. Seguimos en el terreno de la fantasía, con esta serie ambientada en Valdemar que cuenta la historia de la 'Heraldo de la Reina', Talia, y su Compañero Rolan (unos seres mágicos que, en apariencia, no son sino caballos de gran hermosura). Aventuras, romance, política, magia, intrigas palaciegas y poderes sobrenaturales en tres libros que, más que leerse, se devoran.

Una temática parecida, por otra parte, a la que se puede encontrar en "Legacy", de Cayla Kluver, si bien el marco es mucho más restringido por la principesca condición de su protagonista; pero obra que merece también mención, aunque sea por la tierna edad de su autoria, que si mal no recuerdo tenía 15 años. También una primera parte, por cierto, que parece que lo de las series está muy de moda. Lo cual es genial cuando disfrutas de la trama, pero mala cosa para los bolsillos...


SEPTIEMBRE (Volviendo a la vida de estudiante)- 11

*Libro del mes: "La Historia de Zoë", de John Scalzi. Ciencia-ficción de la buena y asequible para todos los públicos, en un libro que consiguió eso que a mí me parece tan difícil: hacerme reir a carcajadas... y, sí, también hacerme llorar. Sentido del humor, capacidad para conmover; aventuras, personajes muy reales... Desde luego, yo me que quedado con ganas de leer más cosas de este autor (que tome nota el que quiera regalarme un libro, jejeje).
Por cierto, que los hechos que se narran en ese libro son, según parece, los mismos que en "La Colonia Perdida", pero desde el punto de vista de su protagonista adolescente. Evidentemente, no habiendo leído este último no puedo hacer comparaciones, pero este me parece magistral, así que...


OCTUBRE (Sin novedad en el frente)- 13

*Libro del mes: "La Cúpula", de Stephen King. Para mí, lo mejor del autor en los últimos años. El elemento sobrenatural e inexplicable acaba siendo poco más que una excusa; hasta el punto de que no importa demasiado la forma en que se resuelve ese aspecto, pues lo que más se disfruta del libro es todo lo que sucede entre el punto de partida y el final. Héroes cotidianos, marginados que se redimen, niños con un algo especial y malos muy humanos, movidos por la ambición... 1.100 páginas que se consumen con gran satisfacción y un punto de hambriento ansia.

Menciones para "El Castillo Soñado", de Dodie Smith, autor de los famosos dálmatas Disney, y que según parece es todo un clásico para los jovencitos anglosajones de varias generaciones (verbi gracia, J.K. Rowling); o para la hermosa "Un Árbol Crece en Brooklyn", otro clásico (americano) de otra Smith (Betty).

NOVIEMBRE (La vida sigue igual...)- 13

*Libro del mes: "Beso de Vida", de Daniel Waters. ¿No os avisé de que volveríamos a hablar de él en breve? Segunda parte de la trilogía, que, como dije en su momento, no es sino más de lo mismo... pero, tratándose de Waters, eso no puede ser sino un halago. Para todo aquel que desee saber que pasó después del apoteósico final de "Generación Dead": ¿qué fue de Tommy, Phoebe, Karen y Adam? Una agradable novedad son los capítulos narrados desde el punto de vista de este último que, teniendo en cuenta las circunstancias que no se pueden nombrar para no estropear el argumento al que no haya leído aún la primera parte, constituyen un toque genial para la historia.
Esperando la tercera parte...

Poco más que destacar en este mes, salvo quizá la adictiva trama de "La Banda de la Misericordia", de Michael Blaine, una historia de misterio ambientada en la Nueva York de finales del siglo XIX con tintes más oscuros de lo que puede parecer a simple vista por su argumento (alguien ha dejado una hilera de gatos muertos enfrente de un edificio, y no es la primera vez que algo así sucede; se trata de un grupo de señoras que se hace llamar La Banda de la Misericordia y se dedica a matar gatos callejeros...).


DICIEMBRE (¡El diluvio!)- 18

Y, tras semejante diluvio literario, y para variar, esta vez voy a prescindir del título honorífico y destacar unos cuantos... pues aunque quizá ninguno de ellos ha pasado a engrosar las filas de mis favoritos indiscutibles, todos ellos son, de una forma u otra, claramente recomendables (aunque sólo sea porque yo soy de la opinión de que hay un libro para todo el mundo y, por lo tanto, nadie puede decir que no le gusta leer: simplemente, se trata de encontrar el indicado).

* "La Ternura de los Lobos", de Stef Penney, es una obra en la que a mí lo único que no me satisfizo fue el final, demasiado abrupto, pero que está repleta de personajes originales en su cotidianeidad y en la que la autora mezcla tramas con gran habilidad, y misterios del pasado y del presente que mantienen el interés del lector en todo momento.

* "Angegology", de Danielle Trussoni. La verdad es que tenía ciertos prejuicios a la hora de enfrentar la lectura de este libro, pues tengo cierta tendencia a desconfiar de las grandes campañas de marketing (aunque no tengo muy claro hasta que punto en este caso fue ésta efecti ...va). Sin embargo, tengo que decir que la historia me gustó más de lo que esperaba: una lectura agradable que, dejando a un lado el toque sobrenatural, bien puede definirse como novela de misterio y aventuras. Muy en la línea de "La Historiadora" de Elizabeth Kostova, "El Ocho" de Katherine Neville, "El Último Catón" de Matilde Asensi o, incluso, la serie de Pendergast de Preston y Child.

* "Canciones para Paula", de Blue Jeans, pseudónimo bajo el que se esconde Francisco de Paula Fernández. Respecto a este libro, que según parece nació en internet, se pueden decir muchas cosas, y no todas necesariamente buenas... pero tampoco malas. En primer lugar, está clara la predilección que el autor siente hacia Federico Moccia y su obra. Lo cierto es que el estilo de este libro es muy similar al del italiano: pesonajes jóvenes y desenfadados, mucho diálogo ágil y una ambientación muy actual, con muchas referencias a la cultura popular (música, sobre todo, como no podía ser menos con semejante título, pero también películas). Dicho esto, lo que se puede esperar es, efectivamente, una historia bastante parecida a un culebrón o teleserie al uso: algo que engancha pero que, en el fondo, resulta demasiado efectista en su planteamiento. El final se parece mucho a esos finales de temporada que no llegan a satisfacer y, desde luego, deja todo demasiado en el aire. Una vez más (pues a mí me pasa muy a menudo) los personajes secundarios consiguen reunir más simpatías que los principales, muchos de los cuales resultan hasta un pelín cargantes. Pero bueno, con referenicas a Moccia y las teleseries, no lo vamos a negar: la cosa engancha bastante y, desde luego, se lee con gran facilidad. Cerca de 700 páginas que se ventilan antes de que te des cuenta... y curiosidad por la segunda parte.

*"El Discurso Secreto", de Tom Rob Smith, se articula en torno al informe que Nikita Jrushchov hizo público en 1956 en el XX Congreso del Partido Comunista, en el que se desmarcaba del dogmatismo ideológico de Stalin y de todos los crimenes y errores de aquella época. A partir de ahi, lo que tenemos es una muy buena novela de suspense sobre la venganza, la redención y los errores y pecados del pasado, protagonizada por Leo Demidov, al que el autor ya nos presentaba en la magistral "El Niño 44". Para mí no llega a la altura de la anterior, pero es que ésa era realmente muy buena. Y ahora hablan de bestseller, pero yo no estoy muy segura de hasta que punto es una obra conocida por el público en general. En mi caso, fue un auténtico descubrimiento, de los se producen de la mejor forma posible: por pura casualidad... y, desde luego, no puedo dejar de recomendarla.


¡Madre mía! Después de esto, casi siento la tentación de disculparme, más que nada ante aquellos que aún no supieran de mi tendencia a redactar auténticos testamentos salidos de la nada que, la mayor parte de las veces, dicen poco sino nada. Pero como al fin y al cabo tampoco espero que nadie haya llegado hasta aquí, pues esto es más archivo personal y auto-memoria histórica que otra cosa, creo que omitiremos la disculpa.
De todos modos, la cosa tiene su lógica: un año da para mucho... y el 2010 ha sido muchas cosas, pero no una excepción a la regla. Seguro que las entradas del 2011, por su carácter contemporáneo, serán mucho más livianas... ¿lo prometo? Casi, casi, pero no lo haré por si las moscas.

¡Feliz 2011 a todos! No me cabe la menor duda de que, sino mejor (aunque eso no es muy difícil) que el 2010, desde luego será diferente.